Si quieres quieres profundizar tus conocimientos sobre el estudio y la práctica de yoga, son las clases uno a uno las que, sin duda, ofrecen el mayor beneficio. Esto, principalmente, porque se produce un diálogo directo y profundo entre profesora y practicante, donde los objetivos y observaciones son personales y acorde a la necesidad exclusiva de quien practica. Es con esto en mente que son desarrolladas las secuencias de práctica. Es también una gran oportunidad para la reflexión sobre aspectos más teórico-filosóficos del estudio de yoga, creando así una discusión que trasciende el cuerpo físico y el espacio del mat.
Además, está el beneficio de que las clases se organizan de acuerdo a tu disponibilidad de horario y pueden realizarse tanto en tu propio hogar como en una sala de yoga. Donde tú prefieras.
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